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Paul Klee- Elementos morfológicos

En las obras de este pintor destacan el uso del color y la línea. Klee hace un gran estudio del color, le cede mucho protagonismo en sus pinturas.

«Separación vespertina» es un ejemplo de la importancia del color en sus obras. Esta obra se basa en el contraste entre tonos cálidos y frios.

También juega con la fusión de los tonos en muchas otras pinturas como esta en la que se mezclan tonos cálidos, como el rojo, con otros fríos, como el azul, y los degrada de tal forma que parecen fundirse.

Las líneas pueden aportar dinamismo, como en este cuadro compuesto por rayas de colores que parecen salir de la parte superior del cuadro y deslizarse hacia abajo como si se tratara de una cascada de colores.

También las utiliza para crear formas – como en esta pintura, donde a partir de líneas va creando siluetas de seres humanos- o para delimitarlas, como en esta otra.

En sus trabajos encontramos igualmente otros elementos, como el punto que aquí está representado por ese árbol naranja en medio de cuadrados azules.  O la textura que aportan algunas técnicas que usa en los dibujos, como la suavidad que podemos percibir al observar esas nubes rojizas.

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